En un pobre partido, Boca sacó la ventaja soñada para viajar a Porto Alegre. Goleó 3 - 0 en campo propio a los brasileños de Gremio por la primera final de la Copa Toyota Libertadores. 
Como dijimos el partido no fue bueno. Boca sufrió un poquito de entrada hasta que pudo hacerse fuerte a partir de la recuperación de la pelota, de la ubicación en el campo y de la conducción de Riquelme. Boca saca la primera ventaja en un error de la terna arbitral, fue off side de Palermo a la salida de un tiro libre de Riquelme. El propio 9 intenta el remate al arco que termina metiendo Palacio por otro error en la jugada, esta vez de la defensa brasileña. Se quedaron todos esperando que el árbitro sancione el fuera de juega y nadie volvió a intervenir en la jugada. Gremio también tuvo sus oportunidades, pero Caranta se hace cada vez mas fuerte. Boca salió decidido a la segunda etapa. Necesitaba goles para tranquilizar la vuelta en tierra brasileña. Dátolo por un deslucido Cardozo (hace ya unos cuantos partidos) y mayor volúmen de juego. Gol de Román en un tiro libre casi recto al arco en una jugada de dos toques; la saca de la barrera Morel y Riquelme le apunta al último hombre de la barrera, Lucas. Este saltó (cosa que no debe hacerse) y por ahí pasó la pelota para sorprender a Saja; 2 - 0. El tercero cayó de maduro por la presión xeneize, por el jugador de menos de Gremio y por un jugadón de Riquelme.
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