El presente del millonario dista mucho de ser el que pensaba todo el mundo del fulbo al comenzar la temporada.
Daniel Passarella pudo traer los jugadores que quería y dejo ir a otros tantos, los refuerzos no serán galacticos pero se trata de jugadores probados y que en otros equipos funcionaban muy bien.
Podemos nombrar a Mauro Rosales, un excelente wing derecho a la antigua, rápido, habilidoso y que lanza centros en velocidad con buena precisión.
Leonardo Ponzio, jugador poli funcional que rinde mejor a mi entender como volante
de contención y con una muy buena pegada.
Diego Galván, viene de hacer un muy interesante campeonato con Estudiantes de La Plata, salio campeón y rindió perfecto como volante por afuera llegando por sorpresa al área rival y convirtiendo muchos goles. Simeone lo utilizaba tanto por derecha como por izquierda.
Cristian Villagra, hábil lateral izquierdo con mucha proyección y que en Central pisaba muy seguido el área rival.
Todos estos refuerzos, y solo cite a los de más jerarquía, sumados a una base que preparo en el torneo anterior le tendrían que haber servido al técnico para formar el equipo candidato a ganar la copa y el campeonato local.
Los comienzos del fracaso
Desde antes que termine el campeonato anterior, el técnico ya había empezado a pensar el equipo para este semestre, limpio del equipo a Gallardo y le dio la batuta a Belluschi como eje del juego, así como adelanto que el sistema elegido era el 4-4-2.
Hasta acá esta perfecto y la propuesta podría resultar interesante y sobre todo después de la prueba en el Superclásico que River gano claramente.
Los problemas, a mi entender, vienen cuando empieza a cambiar nombres semana tras semana y no darle rodaje al equipo. Hay que reconocer que hubo muchas lesiones, pero también hubo rotaciones totalmente injustificadas y que le sacaron rodaje al equipo.
Después de casi 20 partidos quien puede decir ¿cual es la defensa central de River?, Belluschi ¿de que juega?, ¿quien es el volante por izquierda?, todos estos interrogantes sacaron de sintonía al equipo y terminaron sin saber a que jugaban.
El esquema 4-4-2 puede ser muy interesante y creo que River tenía los jugadores para aplicarlo. Zapata por izquierda, Galván por derecha y un doble cinco con Ponzio y Belluschi pintaban como un excelente mediocampo, pero al faltarle kilómetros en conjunto y no aceitar el sistema, una merma en el rendimiento de Belluschi pareció que era el fin del equipo.
Esto si fue responsabilidad del técnico, no le dio confianza a los jugadores y el rendimiento como equipo nunca apareció.
En defensa se dio una situación similar, es sabido que los dos centrales le dan firmeza a un equipo y River nunca la tuvo, por el puesto pasaron Lussenhoff, Nasuti, Gerlo, Rivas, Tuzzio, piensen en estos nombres y en todas las combinaciones posibles, así es imposible darle seguridad a una defensa.
Pensando en futuro
De ahora en más River puede llegar a ser campeón del Clausura, aunque francamente lo veo muy difícil, el tema es que a Passarella se le dieron todas las posibilidades para formar un buen equipo y esta tarea no fue cumplida, si debe seguir o no es descición de los dirigentes, esto es lo mas grave, solo cabe rescatar que los objetivos no fueron cumplidos y asistimos a un verdadero fracaso.
Daniel Passarella pudo traer los jugadores que quería y dejo ir a otros tantos, los refuerzos no serán galacticos pero se trata de jugadores probados y que en otros equipos funcionaban muy bien.
Podemos nombrar a Mauro Rosales, un excelente wing derecho a la antigua, rápido, habilidoso y que lanza centros en velocidad con buena precisión.
Leonardo Ponzio, jugador poli funcional que rinde mejor a mi entender como volante
de contención y con una muy buena pegada.Diego Galván, viene de hacer un muy interesante campeonato con Estudiantes de La Plata, salio campeón y rindió perfecto como volante por afuera llegando por sorpresa al área rival y convirtiendo muchos goles. Simeone lo utilizaba tanto por derecha como por izquierda.
Cristian Villagra, hábil lateral izquierdo con mucha proyección y que en Central pisaba muy seguido el área rival.
Todos estos refuerzos, y solo cite a los de más jerarquía, sumados a una base que preparo en el torneo anterior le tendrían que haber servido al técnico para formar el equipo candidato a ganar la copa y el campeonato local.
Los comienzos del fracaso
Desde antes que termine el campeonato anterior, el técnico ya había empezado a pensar el equipo para este semestre, limpio del equipo a Gallardo y le dio la batuta a Belluschi como eje del juego, así como adelanto que el sistema elegido era el 4-4-2.
Hasta acá esta perfecto y la propuesta podría resultar interesante y sobre todo después de la prueba en el Superclásico que River gano claramente.
Los problemas, a mi entender, vienen cuando empieza a cambiar nombres semana tras semana y no darle rodaje al equipo. Hay que reconocer que hubo muchas lesiones, pero también hubo rotaciones totalmente injustificadas y que le sacaron rodaje al equipo.
Después de casi 20 partidos quien puede decir ¿cual es la defensa central de River?, Belluschi ¿de que juega?, ¿quien es el volante por izquierda?, todos estos interrogantes sacaron de sintonía al equipo y terminaron sin saber a que jugaban.
El esquema 4-4-2 puede ser muy interesante y creo que River tenía los jugadores para aplicarlo. Zapata por izquierda, Galván por derecha y un doble cinco con Ponzio y Belluschi pintaban como un excelente mediocampo, pero al faltarle kilómetros en conjunto y no aceitar el sistema, una merma en el rendimiento de Belluschi pareció que era el fin del equipo.
Esto si fue responsabilidad del técnico, no le dio confianza a los jugadores y el rendimiento como equipo nunca apareció.
En defensa se dio una situación similar, es sabido que los dos centrales le dan firmeza a un equipo y River nunca la tuvo, por el puesto pasaron Lussenhoff, Nasuti, Gerlo, Rivas, Tuzzio, piensen en estos nombres y en todas las combinaciones posibles, así es imposible darle seguridad a una defensa.
Pensando en futuro
De ahora en más River puede llegar a ser campeón del Clausura, aunque francamente lo veo muy difícil, el tema es que a Passarella se le dieron todas las posibilidades para formar un buen equipo y esta tarea no fue cumplida, si debe seguir o no es descición de los dirigentes, esto es lo mas grave, solo cabe rescatar que los objetivos no fueron cumplidos y asistimos a un verdadero fracaso.
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